Beneficios del drenaje linfático con ondas de choque

Cada día, más centros de estética apuestan por el uso de las ondas de choque como tratamiento para el drenaje linfático. Esta nueva tecnología, capaz de reducir los hoyuelos definidos y el dolor al pellizcar (celulitis fibrosa), aporta grandes ventajas en el tratamiento de la celulitis edematosa, mejorando el aspecto de la piel afectada por la retención de líquidos. 

Gracias a su increíble capacidad para propagarse a través de los tejidos, las ondas de choque producen numerosos beneficios en las estructuras tisulares, mejorando la efectividad de los tratamientos y la satisfacción de los pacientes que se someten a ellos. Pero… ¿cómo funcionan?

Las ondas de choque pueden actuar directamente sobre la causa de la celulitis

Muchos tratamientos abordan los efectos estéticos de la celulitis, pero las ondas actúan directamente sobre sus causas. A través de su aplicación, estimulamos el sistema linfático, incrementando su capacidad para desechar toxinas y líquidos.

Asimismo, se aumenta la creación de factores de crecimiento encargados de la regeneración de la piel, de los vasos sanguíneos responsables de la microcirculación en la zona afectada y se mejora la permeabilidad de la membrana celular que libera los ácidos grasos.

Rompe los septos fibrosos

Las células de grasa tienden a agruparse en forma de lóbulos que al aumentar su cantidad hacen protuberancias que abultan la piel, mientras los septos fibrosos se retraen provocando la textura y apariencia características de la celulitis.

Al romper los diferentes septos fibrosos, las ondas de choque hacen más eficiente la circulación linfática y la estimulación de las células grasas. El tejido conectivo se fortalece gracias a una mayor producción de elastina y colágeno, proteína indispensable para la regeneración de la piel.

Mejor aspecto de la piel

El romper las estructuras fibrosas y mejorar la eliminación de la grasa, las ondas de choque favorecen la desaparición de lo hoyos de la piel de naranja. Pero eso no es todo, porque las ondas estimulan los factores de crecimiento y el colágeno dando más firmeza a la piel, haciendo más tersa su apariencia.

Sesiones de tratamiento sin dolor

Las sesiones con ondas de choque son muy sencillas y cómodas para el paciente, no se requiere una preparación especial, lo que aumenta la cantidad de pacientes que pueden someterse a los denajes linfaticos con estos equipos.

Asimismo, las actividades rutinarias pueden ser retomadas de manera inmediata, es decir, que el paciente no verá que su día sea afectado de ninguna manera por el tratamiento. Tampoco son necesarios los cuidados en casa.

Cada sesión puede durar entre 15 a 30 minutos dependiendo de la extensión de la zona a tratar y la complejidad del caso, la cantidad necesaria para unos resultados óptimos puede variar entre 5 a 10, según lo que se considere adecuado en diagnóstico.

Si quieres saber más sobre las ondas de choque como tratamiento de drenaje linfático, sólo tienes que rellenar el formulario que encontrarás en esta página. Nuestro equipo se pondrá en contacto contigo con la mayor brevedad posible para resolver todas tus dudas. Somos distribuidores oficiales de Storz Medical. Contáctenos.

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